HONDURAS
Le dicen 'la rodilla' de Centroamérica por su posición geográfica y estratégica. Esto también les valió que los USA decidieran hacer la base militar más grande que mantienen en Mesoamérica para atormentar a todos los vecinos de Honduras. Y de paso, para mantener una zona en calma dentro de un subcontinente soliviantado con insurgencias y guerrillas. Así la 'república bananera' por excelencia tuvo su período de paz y desarrollo. Los efectos son claros: te gritan gringo casi a diario. Grrrrrrr. Cuando yo llegué estaban celebrando la investidura de su nuevo presidente, del partido liberal, el del color rojo. El opositor es el del color azul, los conservadores. A pesar de que el clientelismo aún asfixia la política del país, parece que los vientos de izquierda que corren por toda Latinoamérica también llegaron aquí. A ver qué tal.
La ruta siguió la divisoria de aguas por una zona de bosques húmedos de alisos y coníferas, alejados del trópico utópico. Tras el bonito encuentro con Gus en Tegucigalpa, salí de la capital en compañía de Christian, junto al que no pedaleaba desde el noroeste argentino. La verdad es que pedalear sólo es un rollo. Mejor acompañado, aunque sea veramente difícil encontrar tu otra rueda.
Tegus
Desde la frontera con Nicaragua, un largo y bonito descenso nos lleva a Danlí, en el corazón de la zona tabaquera del país. Huele a cigarro puro mientras vamos rodando y adentrándonos por sierras de pinos que nos hacen olvidar las latitudes tropicales. Llegamos a El Zamorano y su Centro Agrícola, el orgullo de la Nazareno nación y motor del desarrollo agrario de Honduras. Da gusto ver tantos cultivos de hortalizas, campos de frutales. Una última cuesta y con la carretera destrozadita entramos en Tegucigalpa.
Tegus es un lío, de esas ciudades imposibles para orientarse, con barrios en cuestas y quebradas, y multitud de barriadas sobrecreciendo en los alrededores. Allí conecté con Gustavo por medio de la lista del Club de la Hospitalidad. Y que buen conecte. Gus y sus colegas tienen montada una empresilla que provee servicios de la web. Y no les va mal. Vive sólo, frente a la casa de sus padres, y sabe menos de cocina que mi tía la ciega. Así que él me enseña unos truquitos de computadoras y yo a cocinar ‘pasta 'a la carbonara'.
Visito la embajada española a ver si les cuelo el audiovisual a la Oficina Cultural. Allí trabaja Alvaro, que es de Txurdinaga, y lleva varios años trabajando en cooperación. Para ser vasco y tener el libro 'El pensamiento político de Franco' en la estantería de su despacho, Alvaro tiene un par de c.... Me comenta que él no sabía que Franco tuviera 'pensamiento político', y yo pongo en duda de que siquiera tuviese 'pensamiento'. Con él y su novia y Laurita, otras 'co-operantes', cayeron unas birras.
Con Gus también cayeron más birras, con sus cuates y en casa, donde uno de ellos cantaba unas coplillas muy chistosas de San Pedro Sula, y una chica muy chula, y una mula..... También nos fuimos de technoparty con una vecinita suya muy linda, y nos jugamos unas cascarillas de fut un sábado por la tarde. En Tegus hay más que maras y violencia. Muy buen rollo el del Gus. Quizás este otoño se vaya a vivir un rato con su novia canadiense, y quizás entonces nos veamos allá. La vida es un bolero. Quizás, quizás, quizás.
Por el monte
Quedo a la salida de Tegus con Christian y celebramos el re-re-etc-encuentro con unas rosquillas caseras, típicas de Honduras, y una buena pedalada. Vuelven los bosques de coníferas. Pasamos la primera noche con los bomberos de La Paz. Juegan River y Boca. El fut es ya más que la religión en todo el mundo, pero también una forma de vincularse con el otro. Por cierto, ganó River. Al día siguiente comenzamos a adentrarnos en la sierra con una lluvia persistente. A los 40 km nos refugiamos a pasar el resto del día en un pueblito menor a la orilla de la carretera, donde no dudan en darnos cobijo en el mercado municipal.
Amenece despejado y el asfalto se transforma en trocha. Unas sierras más y ya vemos El Salvador y su línea de volcanes recortarse en el cielo. Un tramo en asfalto seguido de otro sin pavimento nos ponen en Gracias, la primera capital del país, debajo del Monte Celaque. A mi me apetece subirlo y a Christian no. Como ya hemos visto en estos días que no sólo diferimos en eso, decidimos separarnos y él continúa ruta. Viajar bien acompañado es tan importante como saber viajar sólo.
El Monte Celaque es la fábrica de agua de Centroamérica. Unos 15 cursos de agua que llegan tanto al Atlántico como al Pacífico salen de esta montaña que casi siempre tiene una nube en su cumbre. Pasar una noche dentro del bosque de alisos, oyendo el contínuo gotear de la lluvia ha sido de las vivencias más curiosas del viaje. Desde la cumbre, a la que subí dos veces para probar fortuna, tampoco llegué a ver el mar. Como siempre. Descenso, cervecitas en el bar de los 'co-operantes' españoles, bañito en las aguas termales, y al día siguiente pista.
Las ruinas mayas de Copán
El último capítulo hondureño fueron las ruinas de Copán, que merecen mucho, pero que mucho, mucho, la visita. De Gracias a Copán fueron dos días de subidas y bajadas. Desde La Entrada ya se pueden apreciar las primeras ruinas de la cultura maya. Pero Copán tiene muy pocos rivales en todo el mundo maya, pues aquí parece que se desarrolló de forma inusitada la escultura y el sobrerrelieve. El campo de pelota, la escalinata, las estelas, esculturas... No os cuento más, id y vereis. A mi, que había vivido en México 3 años y conocía bastantes ruinas mayas de allá, me dió un ataque de nostalgia y muchas alas por llegar pronto a Mex.
En el pueblo de Copán coincido con Christian, que anda vendiendo sus biclas de alambre en un sitio ideal por la cantidad de turistas que pasan. Le va bien y nos tomamos unas chelas. Charlamos de nuestras próximas rutas, de esto y de lo otro. Mola ser diferentes. Confío en que Christian sepa perdonar y olvidar mis asperezas y yo haga otro tanto. Con el espíritu más tranquilo y con ganas de ver tierras charras me subí la última cuesta de Honduras antes de caerle a Guatelandia.
Datos básicos del país
Con este apartado pretendemos, en cada artículo, dar una información más técnica sobre el material que utilizamos, así como comentarios y trucos para hacer el viaje en bici más fácil.
El Club de la Hospitalidad (www.hospitalityclub.org)
Un buen dato para los viajeros mundiales. Una lista de gente dispuesta a ayudar a encontrar alojamiento, orientar en una ciudad o simplemente dar info. A mi me ha funcionado muy bien en las ciudades, principales 'escollos' en la ruta. Hay un grupo de ciclistas dentro del Club. Gracias a Christian por el dato.